Querida comunidad:
¿Qué tal vuestra primera noche de campamento?
Aquí hemos tenido una noche muy fresquita y hemos amanecido bien abrigados, pero ahora el sol ya calienta y hemos vuelto al pantalón corto y la camiseta.
Los monitores comenzábamos el día con la oración en la tienda-capilla, con la invitación de ser conscientes del regalo que se nos hizo en el bautismo: ser cristiano.
En el desayuno el café, la leche y el cola-cao bien calentitos nos han sentado fenomenal y con eso y pan tostado, mermelada, mantequilla y galletas, nos hemos ido al buenos días donde nos esperaban Pedro, Rebeca y Matías (discípulos de Jesús) para mostrarnos como fueron sus comienzos.
No fue un tiempo fácil porque ya todo lo hacían sin Jesús. Pero el bautismo, el primer sacramento que recibimos los cristianos, es el que a ellos les llena de espíritu y comienzan a ser diferentes: transmiten su mensaje valiente, tienen luz en la mirada, viven todos juntos, soplan aires de comunidad; cuando pasan al lado de los demás la gente murmura: “Ahí están, ahí están, los que creen en Jesús.”.
Y así nos hemos lanzado a vivir el día, reconociendo los signos del cristiano: el pez, el ancla, el crismón.
Nosotros nos hemos parado a mirarnos unos a otros… ¡increíble!, nosotros también somos de los que creen en Jesús.
Todo comenzó con nuestro BAUTISMO, se nos puso un nombre, se nos ungió con el óleo de los catecúmenos, el agua nos lavó y la luz la sujetaron nuestros padrinos para que no olvidáramos cuál es el faro a mirar.
Ha sido un día intenso, un día de descubrir que vamos a la par con los apóstoles y lo que viven, sus hechos. Ahora nosotros empezamos a escribir los nuestros.
Nuestro día ha terminado con la eucaristía…
bien cuidada y preparada.
y allí hemos renovado nuestro bautismo, nuestro ser cristianos, nuestro sí, nuestro “merece la pena estar aquí”, nuestro “tiene sentido”, nuestro “juntos en comunidad”.
Y ¿vosotros?, ¿os apuntáis?
Nosotros hemos dicho sí.
Os dejamos una galería con más fotos del día:
¡Pero qué bonito es veros en el campamento a todos juntos: peques y grandes, catequistas y equipo de cocina!
¡Qué grandes esos catequistas! y qué regalo crecer y descubrir juntos como comunidad el tesoro de nuestra fe.
Gracias Nieves por acercarnos el campa a los que os acompañamos en la distancia.
Que gusto veros tan contentos y disfrutones.
Que alegría renovar en comunidad el bautismo y el deseo de seguir a Jesús.
Que «hechos» tan auténticos estáis viviendo: llenos de compartir con el otro, alegría, compromiso, fuerza en Dios, entusiasmo…, como fieles seguidores de Jesús.
Que el Espíritu os siga animando a aprender juntos de los primeros discípulos y hacerlo vida. Que sigáis disfrutando muchísimo. Para nosotros es un regalo enorme lo que estáis viviendo y sois un regalo para nosotros.
Os echamos mucho de menos. Un abrazo grande.
Icíar y Carlos
Muchas gracias por el resumen y las fotos. Se nota que lo estáis viviendo intensamente y con mucha emoción. Un abrazo a todos!
Holiiiiiiiii!!! Si, el curso se pasa muy rápido y volvemos a encontrarnos.
El tema de este año se me está haciendo un poquito complicado, pero no por ello menos interesante.
El Espíritu Santo, cómo explicarlo? Para mi un gran desconocido.
Pienso que el campamento es vuestro Pentecostés particular (quizás me he venido arriba). Vuestra venida del Espíritu Santo. No se ve, como el amor, pero lo sentís. Os enseña, os da esperanza y os ayuda a ser mejores. Os da valor para ser testigos de Jesús en vuestra vida diaria. Os anima a continuar con la misión de los Apóstoles.
Y os ayuda a continuar construyendo juntos, curso tras curso, año tras año!!!
Besitos mil!!!